Usted está eligiendo darse de baja de mis correos electrónicos. ¿Es verdad que quieres dejarme? Estoy a punto de sacarte de mi lista.
Me gustaría seguir manteniendo el contacto contigo y siento perderte como suscriptor. Pero si has decido dar este paso es porque supongo que mis boletines ya no te están resultando útil.
Seguiré trabajando para que vuelvas conmigo y para que vuelvas a confiar en mí.